Ayer fuimos toda la familia a ver una obra de teatro, la
verdad es que en los últimos meses hemos ido a bastantes cosillas de estas, y
fuimos a una sala que no habíamos estado antes, al teatro de la CNT, yo apenas hace un mes que
descubrí que existía… La cosa es que me encantó, no sólo la obra que ahora os
contaré sino el sitio en sí.
Mientras esperábamos a que comenzara estuvimos todos
esperando en una zona que me trajo un montón de recuerdos, le comentaba al papá
de las brujas que había un momento en que no sabía si estaba en un teatro o en
la antigua lonja de la cuadrilla donde tenían cabida miles de cosas distintas,
muebles encontrados en la basura, los sillones de casa de la abuela, mil
carteles, decoraciones diversas,… Si no fuera porque tenía allí a mis dos
brujas danzando entre sillones orejeros, caballitos balancines y multitud de
peluches hubiera esperado ver entrar por la puerta a cualquier viejo amigo. Fue
un momento en que fui inmensamente feliz, donde se juntó mi yo de hace quince
años y mi yo actual comprobando que al final los dos son los mismos aunque las
circunstancias sean distintas.
Estuvimos viendo “El sastrecillo valiente”, cuento que
aunque sea terriblemente conocido yo no recordaba la historia, a las brujas les
gustó mucho y a nosotros también. La mayor había momentos que no dejaba de
reirse y otros en los que no pestañeaba, cuando terminó me dijo que se lo había
pasado muy bien (seguramente lo dibujará hoy en el cole cuando hagan el dibujo
del fin de semana) y la pequeña no paró pero lo disfrutó, continuamente me decía
“mamá así” e imitaba lo que hacía el actor en ese momento y aunque todavía
hable muy poco se veía que seguía bien la historia, incluso cuando apareció el
jabalí decía que era un lobo y se me agarraba haciendo que le daba miedo.
A nosotros también nos gustó, fue una obra con un solo actor
contando la historia y representando a todos los personajes que supo atraer la
atención del público desde el primer momento. A mí además me gustó el hecho de
que a las niñas les gustara una obra que se salga de su mundo fantástico de
duendes, hadas y sirenas en el que estamos continuamente inmersas.
La verdad es que cada día disfruto más llevando a las niñas
a diferentes espectáculos y viendo como se emocionan y gozan con estas cosas. Por
supuesto ya tenemos entradas para otra cosa el próximo sábado!! Hay que
aprovechar estos fines de semana en los que ya no se puede estar en la calle!!
Que buena tarde en familia y aprovechando que hace mal tiempo, pues eso, un planazo.
ResponderEliminarCuanto tiempo sin verte por aquí!
Besos