No sé si alguna vez os he contado
que tengo gingivitis, no es nada horrible pero es algo que me obliga a
limpiezas bucales bastante asiduas, además al tener los dientes bastante juntos
(parece que no me libro de nada) es fácil que se me acumulen restos entre
ellos.
Como hace ya un año que vengo
colaborando con el laboratorio PHB en su “Rincón de las pequeñas sonrisas” hace
unos días me ofrecieron probar su irrigador bucal y claro, yo no pude decir que
no.
Un irrigador bucal es un
aparatito que mediante un chorro de agua a presión te ayuda en tu higiene
dental llegando donde no llega ni el cepillo ni el hilo dental, dejando en tu
boca una sensación de frescor que yo no había conseguido antes.
Es muy fácil de utilizar, tan sólo hay que enchufarlo y llenar el depósito de agua, una vez que se enciende el agua empieza a salir a presión, en ese momento llevamos la boquilla a la boca y vamos dirigiéndola por todos los dientes.
Se puede utilizar tanto con agua
como con colutorios aunque yo de momento sólo lo he hecho con agua, he de
reconocer que las primeras veces me resultaba una sensación muy rara pero a
medida que me he acostumbrado y viendo el buen resultado lo uso a diario como
una rutina más.
Por supuesto, una vez que lo tengo
me he puesto a buscar ventajas por la red y me encuentro con un par de ellas
que todavía no he podido comprobar pero que me motivan más todavía a seguir
usándolo a diario: la eliminación de manchas de la superficie y la reducción de
placa bacteriana.
Ahora sí, si me preguntaran si
mejoraría algo sí pediría que fuera un poco más pequeño aunque entiendo que el
depósito ya ocupa un espacio que no se puede reducir pero en nuestras minicasas
con minicuartos de baño se agradece todo en tamaño “pocket”…
Seguramente muchos de vosotros
todavía tendréis pendiente algún regalo para estas navidades aunque suene poco
ortodoxo tal vez pueda ser una buena opción para nuestros padres o parejas
(regalar un aparato de higiene a otra persona no sé si sería muy apropiado ;-P).
Es algo que tal vez a uno mismo no nos compraríamos pero que sí usaríamos mucho
si lo tuviéramos, además de que es un producto no demasiado común en nuestro
entorno y muchos no conocerán ni su existencia.
Vosotras, ¿lo conocíais? ¿lo
habéis usado alguna vez?
La verdad es que son muy prácticos, aunque el mío es mucho más pequeño que el tuyo. El que yo tengo es un poquito más grande que un cepillo eléctrico covencional, por eso lo compré, porque con estos minibaños....
ResponderEliminar